Vespene Energy, una empresa que quiere convertir el metano liberado en los vertederos en energía para el minado de Bitcoin, ha cerrado una ronda de financiación de 4,3 millones de dólares para iniciar sus operaciones y hacer su proyecto realidad y comenzar su escalado. Según la compañía, para conseguir su objetivo instala pequeñas turbinas eficientes en vertederos municipales, que se encargan de convertir el metano que emite la basura, que de otra manera se perdería, en electricidad para impulsar centros de datos de minado de Bitcoin.
La finalidad de Vespene con este proyecto es, además de conseguir la energía necesaria para minar bitcoins, ofrecer a los propietarios de vertederos un sistema para convertir gas metano, que es dañino, en una fuente de ingresos. También lograr la generación de energía a partir de fuentes baratas y renovables. Sus creadores usarán el dinero conseguido para lanzar su primer punto piloto en California, lo que la convertirá en la primera empresa que emplea metano producido en vertederos para generar Bitcoin.
Un módulo de Vespene tarda entre cuatro y seis meses en estar listo. Cada uno de estos módulos tiene una capacidad de potencia de alrededor de 1,5 Megavatios y es capaz de eliminar 270.000 toneladas equivalentes de CO2 cada año.
Según ha manifestado Adam Wight, CEO de Vespene, «debido a los elevados costes y a los largo tiempos de generación de energía asociados con los proyectos en vertederos, alrededor del 70% de los cerca de 2.600 vertederos municipales de Estados Unidos no tienen un uso viable para el metano que producen. Utilizando el metano que generan para dar energía para el minado de Bitcoin, Vespene está matando dos pájaros de un tiro, mitigando gases de efecto invernadero dañinos y ayudando a la transición del minado de bitcoin hacia fuentes de energía neutrales en emisiones de carbono y negativas en emisiones».
Wight ha señalado además que su objetivo «es mitigar una gran fuente de emisiones de fases de efecto invernadero y ayudar a impulsar la transición hacia un futuro de energía renovable usando el minado de Bitcoin para convertir los flujos de metano de los vertederos en flujos de ingresos para nuestros clientes«.
La tecnología de minado de Bitcoin ya se ha mostrado prometedora para la mitigación de algunos problemas relacionados con la emisión de gas de efecto invernadero, a pesar de las protestas de algunos legisladores de que los mineros están dañando el medio ambiente utilizando demasiada energía. Los mineros ya han comenzado a desarrollar instalaciones remotas para utilizar gas natural, que se perdería de otra manera, para conseguir electricidad para operaciones de minado. Al hacerlo han conseguido reducir también la cantidad de gas metano liberada a la atmósfera.
