Uno de los aspectos más cuestionados de Bitcoin y otras criptomonedas es el de su, todavía, escaso margen de utilización fuera de su espacio natural. Así, es evidente que el principal uso que se hace de las mismas es la inversión, así como la compra y venta de activos digitales, generalmente también relacionados con el universo Web3. Y el crecimiento en este sentido es un aspecto clave para hacer crecer el ecosistema y naturalizar su uso.
A este respecto es importante, además, que la llegada se vaya produciendo a todos los niveles, desde productos y servicios de lujo hasta todo aquello que podemos emplear, de forma mayoritaria, en nuestro día a día. En este sentido ya vimos un claro ejemplo, hace solo unos meses, con el acuerdo suscrito entre la compañía Tu taxi de confianza y la startup Woonkly Labs, gracias al cual los usuarios del servicio de taxi en Madrid pueden emplear tanto Bitcoin como otras criptomonedas para pagar los servicios. Desde hace mucho tiempo se ha señalado que la culminación de este proceso llegará cuando podamos comprar una barra de pan con Bitcoin, algo que todavía parece lejano, pero no inconcebible.
Por otra parte, donde más desarrollo hemos visto en este sentido es en las operaciones de alto valor económico: inmuebles, vehículos de lujo, etcétera, un sector más proclive a adoptar medios de pago innovadores, como es el caso de las criptomonedas. Y en este sentido la inmobiliaria Fincas Diagonal ha decidido sumarse a la revolución de Web3, al publicar su primera vivienda a la venta pagadera en Bitcoin, un deslumbrante piso de 267 metros cuadrados en primera línea de mar, ubicado en Barcelona.
El anuncio de la vivienda, que también puede ser adquirida con moneda fiduciaria, y que tiene un precio de 2.875.000 euros, se identifica como «BITCOIN FRIENDLY (BTC)» en su inicio, y concluye con un párrafo que es interesante reproducir:
«¿Por qué Bitcoin?
Porque creemos firmemente que es una transacción segura, instantánea y rentable tanto para el vendedor como para el comprador.
Porque el mundo está cambiando y nosotros también.»
Toda una declaración de intenciones de la que podemos esperar que el resto del sector vaya tomando nota. Y es que no es necesario escalar a valores tan elevados como los de este piso de lujo. El importe de compra de una vivienda ya es, por lo general, lo suficientemente elevado como para que el uso de Bitcoin y demás criptomonedas ofrezca, como indica el anuncio, «una transacción segura, instantánea y rentable» para todas las partes implicadas.
Y más aún, si esta inmobiliaria ha decidido dar este salto, ofreciendo la opción de pago en Bitcoin, esto muy probablemente responda a que ya ha recibido el suficiente volumen de feedback como para entender que existe una incipiente demanda de esta posibilidad por parte de los usuarios. ¿Responderá en consecuencia el resto del sector? Quizá todavía tengamos que esperar un poco para comprobarlo, pero las probabilidades de que así sea son crecientes.