La interacción entre humanos y la inteligencia artificial (IA) ha experimentado un cambio significativo en los últimos años, extendiéndose más allá de simples consultas o transacciones comerciales para incluir relaciones virtuales más profundas y, a veces, emocionales. Una de las tendencias más notables en este ámbito es el surgimiento de los «Amores virtuales», donde las personas exploran la posibilidad de establecer conexiones sentimentales o amistosas con chatbots de IA.
Según un estudio realizado por Infobip, más del 50% de las personas entre 35 y 44 años han admitido haber coqueteado con un chatbot en algún momento. Esta tendencia está impulsada por la curiosidad sobre cómo sería una relación con un programa de IA, así como por la búsqueda de compañía sentimental, conversaciones sobre diversos temas o incluso apoyo emocional.
Los chatbots de IA no solo se utilizan para hablar de romance; también se recurre a ellos para discutir sobre temas como política, actualidad e incluso recibir consejos emocionales. En este sentido, los usuarios consideran a algunos chatbots como amigos virtuales, buscando en ellos un alivio para la soledad o un consuelo en momentos difíciles.
Más del 50% de las personas entre 35 y 44 años han admitido haber coqueteado con un chatbot
Sin embargo, la relación entre humanos y chatbots no está exenta de desafíos. Uno de los principales obstáculos es la desconfianza hacia las respuestas proporcionadas por los programas de IA. Muchos usuarios muestran escepticismo sobre la autenticidad de las interacciones y las respuestas generadas por los bots. Esta desconfianza puede ser resultado de experiencias previas o simplemente de la dificultad para aceptar que una máquina pueda ofrecer una conexión emocional genuina.
Además, la seguridad y la privacidad son preocupaciones importantes en este contexto. Se han reportado casos de phishing de IA, donde las personas son engañadas para compartir información personal, lo que conlleva a estafas y otros problemas de seguridad. El hecho de que un 16,7% de los usuarios haya experimentado este tipo de ciberataques subraya la necesidad de medidas de protección más sólidas.
Para contrarrestar estos problemas, se recomiendan el uso de plataformas que implementen medidas de seguridad robustas, como la verificación de identidad. La idea es garantizar que las interacciones con los chatbots de IA sean seguras y confiables.
A pesar de estos desafíos, la aceptación de las relaciones basadas en IA está en aumento. Se percibe una creciente comodidad y familiaridad con la idea de interactuar emocionalmente con programas informáticos, lo que sugiere que estamos entrando en una nueva era de relaciones interpersonales, donde la línea entre lo humano y lo artificial se vuelve cada vez más borrosa. En palabras de Álvaro Ansaldo, Country Manager de Infobip Iberia, «nos encontramos ante una nueva era donde las relaciones virtuales y la interacción hombre-máquina se confunden con las vivencias humanas».
