Con un pie en el inicio de la campaña de la declaración de la renta, Binance nos revela los resultados de una encuesta llevada a cabo en colaboración con TaxDown. El estudio tiene por objetivo comprender las necesidades de los usuarios y las dificultades que enfrentan al declarar sus activos digitales.
Tradicionalmente, la declaración de la renta siempre ha sido una tarea compleja, tediosa, o intimidante para muchos contribuyentes. Esta complejidad parece que aumenta aún más cuando se trata de declarar criptomonedas y otros activos digitales, debido a la naturaleza específica de este tipo de activos.
En la encuesta se encontraron datos significativos que destacan la necesidad de educación y recursos adicionales en este ámbito. Entre los hallazgos más relevantes se encuentra que el 76,95% de los encuestados desconoce cómo declarar sus criptomonedas ante Hacienda.
Principales desafíos
Para una gran mayoría, el 91,24%, declarar las criptomonedas es un proceso difícil, citando entre las principales razones el temor a cometer errores (17,83%), la falta de información clara, (15,36%), y la dificultad para calcular el valor de las criptomonedas (15,29%).
Asimismo, un 95,15% de los encuestados afirma invertir en criptomonedas, de los cuales un 66,2% lleva haciéndolo entre uno y cinco años, mientras que un 16,89% lleva menos de seis meses, destacando el creciente interés en este tipo de activos como una forma de inversión.
Un 47,56% invierte en otro tipo de activos además de en criptomonedas, entre los que destacan las acciones (24,25%), los fondos de inversión (19,83%) y los ETFs (11,28%).
A la hora de hacer la declaración, mientras que un 32,52% prefiere hacerla por su cuenta, un 60,16% acude a la ayuda y asesoramiento profesional a través de plataformas digitales como TaxDown (34.67%) o de gestorías (25.49%). Esto refleja la necesidad por una gran parte de los contribuyentes de contar con el asesoramiento profesional y recursos necesarios para llevar a cabo la declaración. Esto puede estar motivado por algunas de las causas mencionadas anteriormente, como el temor a cometer errores, la falta de información, o la complejidad del proceso en sí mismo.
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