Hoy marca un antes y un después en la esfera de los criptoactivos y puede que también en todo lo relacionado con la tecnología. El 15 de septiembre a las 06:44 UTC se ha producido el Ethereum Merge, la primera fase de las cinco de que consta un proceso de transformación radical en el modo en el que se opera en esta red. Se ha llamado «the Merge» porque lo que se ha hecho es fusionar (merge) dos capas del protocolo: la capa de ejecución Ethereum Mainnet y la capa de consenso Beacon Chain, dándoles una Terminal Total Difficulty de 58750000000000000000000, lo que hace que la red pase de emplear el mecanismo de consenso Proof-of-Work a usar el mecanismo Proof-of-Stake.
Proof-of-Work (Prueba de trabajo o esfuerzo) es un algoritmo desarrollado para poner en marcha mecanismos de consenso que sirve para proteger a redes descentralizadas de actividades malintencionadas. Consta de dos pasos: resolver un problema difícil y costoso en tiempo de ejecución y en comprobar los resultados. Las tareas son resolubles, pero requieren una gran cantidad de potencia de proceso y su dificultad se adecúa para controlar la frecuencia de descubrimiento de nuevos bloques que, en este caso, se mantiene en uno cada 10 minutos para poder tener tiempo de sincronizar todos los bloques descubiertos entre los usuarios que mantienen la cadena de bloques.
El objetivo que se buscó al diseñarlo es que fuera prácticamente aleatorio el minero que resolvería la tarea y descubriría el bloque. El lado negativo es que emplea mucha energía ya que todos los participantes estarán intentando descubrirlo por su cuenta, y todos menos uno habrán empleado esa energía para nada, ya que solo ese conseguirá el bloque.
Proof-of-Stake (Prueba de participación o interés) es también un algoritmo creado para gestionar mecanismos de consenso pero que, en este caso, se basa en la participación o implicación de los operadores de la red. El creador del siguiente bloque se elige de forma aleatoria, pero dentro de una selección que tiene en cuenta la cantidad de bloques que posee y, también, en algunos casos la antiguedad de esos activos.
Como ventajas frente a Proof-of-Work ofrece un menor riesgo de centralización, es más seguro y escalable y, fundamentalmente, mucho más eficiente desde el punto de vista energético. También se dan casos en los que una red emplea algoritmos Proof-of-Work (POW) para algunas funciones y Proof-of-Stake (POS) para otros.
Vitalik Buterin, el cofundador de Ethereum, ha anunciado este evento («the Merge») con un tweet en el momento en el que se ha producido.
And we finalized!
Happy merge all. This is a big moment for the Ethereum ecosystem. Everyone who helped make the merge happen should feel very proud today.
— vitalik.eth (@VitalikButerin) September 15, 2022
La Ethereum Foundation ha señalado que la fusión hará que la red Ethereum sea un 99,95% más eficiente energéticamente lo que abre la puerta a Ethereum tenga una adopción mucho mayor como soporte a todo tipo de usos basados en blockchain.
Tal y como ha declarado Eli Ben-Sasson a Cointelegraph, «el principal impacto de ‘the Merge’ es un descenso enorme de la energía empleada» y que esto «pone en marcha una reacción en cadena de cambios. El resultado final será un uso mucho más extendido de la capacidad de cómputo de Ethereum, y del uso por parte de la población en general de aplicaciones basadas en blockchain en todos los aspectos de la vida«.
The Merge, la primera de cinco fases
Como indicábamos al principio, «the Merge» es la primera de varias fases que transformarán la infraestructura tecnológica en la que se basa la red Ethereum. Tras este primer paso, seguirán otros cuatro en la siguiente secuencia:
Dando como resultado final que Ethereum reducirá el consumo energético y mejorará enormemente la velocidad hara conseguir procesar nada menos que 100.000 transacciones por segundo. Por ahora el proceso ha sido todo un éxito y la comunidad espera impaciente que se vayan sucediendo las siguientes fases.
