Los términos wallet, monedero y billetera de Bitcoin, etcétera, se han popularizado en los últimos tiempos gracias al boom de las criptomonedas. Sin embargo, pese a que es algo en boca de todo el mundo, muchas personas no termina de tener claro en qué consiste exactamente: ¿es software o es hardware? ¿es unipersonal? ¿se puede transferir? ¿se puede perder? ¿puedo tener distintos tipos de criptomonedas en un wallet Blockchain?
Los wallets de blockchain son un elemento clave en el ecosistema de las criptomonedas, por lo que entender su naturaleza y funcionamiento resulta clave para poder desenvolverse en dicho entorno, pues son el elemento con el que podremos realizar todas las operaciones de recepción y envío de criptomonedas. Dicho de otro modo, sin el wallet no podremos operar pero, más aún, ni siquiera podremos acreditar la propiedad de las mismas.
Para entender mejor su funcionamiento de un wallet Blockchain es necesario, previamente, recordar cómo funcionan los sistemas de cifrado y la criptografía de clave pública. No entraremos en detalles técnicos ni matemáticos, basta con recordar que en estos sistemas se emplean dos claves, una pública y una privada, y una permite revertir el efecto de la otra. Así, si nosotros ciframos un mensaje con la clave pública de su destinatario, este podría descifrarlo con su clave privada. Sin embargo, si alguien intenta descifrar un mensaje cifrado con la clave pública empleando esta misma clave solo obtendrá un galimatías ininteligible.
Esto, que puede sonar particularmente complejo, ocurre en realidad siempre que, por ejemplo, establecemos una conexión segura con un servidor de Internet, y gracias a este sistema es posible garantizar la seguridad y privacidad de las comunicaciones sin necesidad de que emisor y receptor compartan una misma clave. Siempre que necesitemos una comunicación cifrada, podremos compartir sin reparos nuestra clave pública (por eso se denomina así) pero, por contra, tendremos que custodiar y mantener siempre a buen recaudo nuestra clave privada.
¿Qué es un wallet Blockchain?
Aunque la analogía con un monedero o una billetera (elemento del que toma el nombre) nos facilita entender su razón de ser, es importante aclarar que su funcionamiento no es similar. Como ya sabes, las criptomonedas no son un elemento tangible, sino registros de transacciones dentro de una cadena de bloques operada por nodos interconectadas entre sí. Así pues, no podemos tener n unidades o fracciones de criptomonedas guardadas en un almacén digital.
Cada wallet Blockchain tiene asociadas una clave pública y una clave privada, de manera que cuando nosotros realizamos una operación con una criptomoneda, ésta quedará asociada a dichas claves en la cadena de bloques. De esta manera, si alguien intenta realizar cualquier operación con los activos anotados en la misma, solo podrá hacerlo si cuenta con la clave privada que demuestre que realmente somos nosotros los que estamos detrás de dicha anotación y, por lo tanto, somos los propietarios de los activos identificados en la misma.
La wallet es la herramienta con la que contamos para almacenar y gestionar las claves pública y privada, una especie de gestor de claves diseñado específicamente para este fin, y de cuya seguridad dependen todos los activos que gestionemos con la misma.
En su primer uso, el monedero generará automáticamente el par de claves necesarias para empezar a operar, y será imprescindible que nos aseguremos de tenerlo respaldado, pues la pérdida del mismo y, con él, de nuestras claves (principalmente la privada) tendrá el mismo efecto que perder nuestra identidad a la hora de ir al banco, nos resultará totalmente imposible recuperar nuestras criptomonedas, pues habremos perdido la clave única que da acceso a las mismas.
Hay muchos tipos de wallets, próximamente publicaremos un artículo explicando en qué consiste cada uno, pero en esta primera toma de contacto empezaremos aclarando una duda muy común, y presente en las preguntas que mencionamos al inicio. Me refiero, claro, a si una wallet es software o hardware, y la respuesta es que, en realidad, hay soluciones lógicas (software), soluciones físicas (hardware) e incluso servicios online, si bien es cierto que en este último caso, nos con la desventaja de que la gestión de la clave privada la realizar la empresa responsable del servicio de billetera, no nosotros.
En cuanto a su funcionamiento, nos podemos encontrar desde wallets muy básicas y que solo funcionan con una blockchain determinada (como por ejemplo con la de Bitcoin) hasta soluciones bastante más complejas, con interfaces muy amigables, capaces de gestionar las claves pública y privada de distintas cadenas de bloques, que se integran de manera transparente con plataformas de compra-venta de criptomonedas, etcétera.
Así pues, a la hora de elegir una wallet, tendremos que valorar qué es lo que nos ofrecen las diversas opciones hasta dar con aquella que mejor se adecúe a nuestras necesidades. Eso sí, en todos los casos es fundamental que prestes especial atención a los aspectos relacionados con la seguridad. Recuerda que en la cadena de bloques la firma privada es el único elemento que permite acreditar la identidad, de modo que una mala custodia de la misma puede hacer que acabe en manos malintencionadas.
